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Ruta 66: el sueño de todo motero
La Ruta 66: el camino a La Meca de todos los moteros
Lo más mítico de la Ruta 66 es su paisaje. La mayoría transcurre por un desierto en el que el polvo se mezcla con el asfalto; y que se encuentra flanqueado por esos montículos de rocas que tanto recuerdan a las películas del Oeste. Miles de moteros la recorren año a año y repostan en sus pequeñas gasolineras, duermen en sus hoteles de mala muerte y toman fuerzas en esos restaurantes de carretera en los que se sirve el café por litros.
Una ruta con historia
Oficialmente, la ruta comienza en Chicago, la Ciudad del Viento. Una ciudad próspera en cuyos bajos fondos emergieron desde el jazz hasta Al Capone. Aquí se originó en el primer tercio del siglo XX una carretera que pretendía servir para vertebrar Estados Unidos y que así lo hizo; aunque haga ya más de tres décadas que está descatalogada como vía principal.
A continuación, el camino pasa por Misuri, donde aún se pueden encontrar verdes paisajes y algún idílico paraje que merecen la pena, y mucho. De ahí se adentra ligeramente en Kansas, donde se encuentra el conocido puente Brush Creek Bridge, el último de los de tipo Marsh que sobrevive en este camino.
Dando gas a tope, los moteros llegarán a Oklahoma, tierra árida y conocida por sus frecuentes tornados en la que, durante la Gran Depresión, sus granjeros emigraban a California a través de esta ruta. Eran pocas oportunidades las que había y las que hay, tal y como se puede ver al pasar por sus inhóspitos lugares durante el trazado.
Desde este Estado la ruta pasa a Texas, donde sobre el paisaje desértico aparecen algunas poblaciones prósperas; y donde se puede ver uno de los símbolos más curiosos del camino: el Cadillac Ranch, compuesto por varios coches semi-enterrados y pintados de colores.
Desierto y llegada
Los dos siguientes Estados son quizá los más míticos del camino: Nuevo México y Arizona. Desierto, silencio, polvo, interminables rectas que se funden con el horizonte y hasta poblados indios se extienden a lo largo de un recorrido que pronto recuperará el verdor.
Lo hará cuando llegue a su destino, un lugar próspero como es California. La población de Santa Mónica será el punto que vea llegar a los moteros, junto a su famoso puerto, flanqueado por palmeras y caracterizado por poseer una enorme noria. Ahí acabará el mito y la épica de cada motero. Ahí se completará la Ruta 66.